POCA FE

DEVOCIONAL

Invariablemente cuando recuerdo sobre la forma en que Jesús debía reprender a los discípulos, a causa de su poca fe, tengo un sentimiento de sorpresa muy grande.

Pero un día el Espíritu me advirtió acerca de mi actitud. Si yo estuviera en el lugar de los discípulos, la situación no sería la misma?

No me tendría que reprender el Hijo del Hombre, a causa de mi poca fe?

Estas preguntas me llevan a la conclusión de que es muy fácil ver los errores en las demás personas y tremendamente difícil verlos y aceptarlos en mi propia existencia.

Jesús es la Verdad y por eso amonestaba a quienes estuvieron durante años a su lado. Si no lo hubiera hecho, podría haber dejado en el ánimo de esos hombres sencillos, la idea de que eran especiales por estar a su lado…y además casi perfectos.

Exactamente como es mi caso. Soy sencillo, pero ni soy especial ni soy perfecto…soy un hombre que precisa ser amonestado cada día, a causa de mi poca fe.

Mateo 16:8 Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Por qué pensáis dentro de vosotros, hombres de poca fe, que no tenéis pan?

Diego Acosta / Neide Ferreira

DÍA DE PENTECOSTÉS

BLOG del TIEMPO

Conmemoramos el cumplimiento de la promesa de Jesús antes de su Gloriosa Ascensión, de que seríamos bautizados con el Espíritu Santo.

En el Libro de Hechos de los Apóstoles se nos testimonia de ese grandioso momento en Jerusalén en el aposento alto, en Pentecostés.

Hechos 2:1-6 Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.

Moraban entonces en Jerusalén judíos, varones piadosos, de todas las naciones bajo el cielo. Y hecho este estruendo, se juntó la multitud; y estaban confusos, porque cada uno les oía hablar en su propia lengua.

Conmemoremos este grandioso cumplimiento de la promesa de Dios, transmitida por el Hijo del Hombre a todos nosotros, en el día de Pentecostés. Anhelemos ser dignos de esta Promesa y de esta Gracia.

Diego Acosta

LAS SEMILLAS

DEVOCIONAL

Una editorial está realizando una promoción para la lectura de la Biblia, utilizando un sobre que tienen en su interior semillas de mostaza.

Aluden así a las palabras de Jesús…

Y la verdad que algo tan sencillo está causando mucho impacto. Este episodio nos hizo recordar las palabras del líder de una iglesia que hace muchos años fue una gran bendición.

Él declaró que el marketing del diablo era excelente y el de los evangélicos…desastroso, aludiendo a la pobreza del mensaje que se emitía desde las iglesias.

Mencionar al diablo y al éxito de su marketing fue sorprendente, porque no era muy usual ni hablar de satanás en esos términos y mucho menos emplear una palabra tan propia de lo mundano.

Sin embargo provocó su efecto, porque el liderazgo de su iglesia reaccionó y hubo un cambio importante en el mensaje evangelizador. Es lo mismo que se espera con los sobres con las semillas de mostaza.

Siendo como es, Dios Creador, por qué no lo imitamos y cambiamos nuestras actitudes?

Mateo 13:32 el cual a la verdad es la más pequeña de todas las semillas; pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de tal manera que vienen las aves del cielo y hacen nidos en sus ramas.

Diego Acosta / Neide Ferreira

 

LA VIOLENCIA

ANTIVIRUS

Los dos episodios extremos vividos en Estados Unidos en las últimas horas, actualizan la cuestión de la violencia, por la notoriedad y por la magnitud de las pérdidas humanas.

Sin embargo es necesario reflexionar sobre este tema, porque la violencia en todas sus variables está presente en la vida de la sociedad de nuestro tiempo.

No debe escapar a nuestro análisis que la violencia está gravemente incrustada en el corazón de los humanos y debemos ser conscientes de los daños que provoca.

No solo en los casos tan graves como los vividos en las últimas horas, sino también en la violencia cotidiana que azota los múltiples escenarios donde se desarrolla nuestra vida.

Viene a nuestra memoria la mansedumbre de Jesús, que desalentó toda reacción a pesar de los agravios y de los cruentos ataques que recibió.

Diego Acosta