CADA UNO…

 

DEVOCIONAL

Creo que somos más los que nos quejamos, los que somos apáticos, que los que se enfrentan a la realidad por dura que sea.

Es más fácil quejarse, que hacer.

Es más fácil caer en la apatía, que superarla.

Si estuviera hablando de personas del mundo, se podrían comprender estos comportamientos. Pero hablando de hombres y mujeres que hemos nacido de nuevo en Jesús, no solo es incomprensible sino intolerable.

Este pensamiento puede resultar muy duro, pero es necesario que cada uno abandone la comodidad de la posición en la que se encuentra y recuerde el Mandato de Jesús.

No estoy en el mundo para buscar situaciones que me agraden,  sino para llevar a otros el Mensaje de Salvación que me redimió.

No importa que no me escuchen, ni que no me atiendan, ni que me repudien. Lo único que importa es que hable lo que tengo que hablar.

Solo así serviré a Jesús!

Y cada uno de nosotros, mostrará su fidelidad al Hijo del Hombre!

Romanos 15:1

ES- Sino, como está escrito:
Aquellos a quienes nunca les fue anunciado acerca de él, verán;
y los que nunca han oído de él, entenderán.

PT – Antes, como está escrito:

Aqueles a quem não foi anunciado o verão,

e os que não ouviram o entenderão.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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CUPIDO…?

Un escritor ha actualizado, seguramente sin desearlo, el Mandato de Jesús, de que tengamos cuidado para no ser engañados.

El motivo no es otro, que el de comparar el amor que podemos sentir hacia Dios, con el amor que se puede considerar está inspirado por Cupido.

Recordamos quién es Cupido?

Era uno de los dioses de la mitología romana, se le atribuía ser hijo de la diosa Venus y de Marte, el dios de la guerra.

No cabe ninguna duda que todas las opiniones deben ser respetadas, pero tampoco podemos dudar en poner de manifiesto la total discrepancia con estas afirmaciones que pueden engañar o confundir.

La advertencia de Jesús tiene mucho que ver con esta afirmación, que relaciona el deseo amoroso, con el amor que debemos profesar al Eterno.

No dejarnos engañar está estrechamente ligado a otro Mandato bíblico, que establece que escudriñemos todo, absolutamente todo.

Solamente así evitaremos ser víctimas de las fantasías que pueden resultar muy atractivas, pero que con peligrosas trampas para los hombres y mujeres de fe.

Mateo 24:4

Respondiendo Jesús,

les dijo: Mirad que nadie os engañe.

Mateus 24:4

E Jesus, respondendo,

disse-lhes: Acautelai-vos, que ninguém vos engane.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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LO TIBIO

Leía con máxima atención lo que un amigo reproducía acerca de un pensamiento relacionado con la iglesia.

Decía: Si la iglesia fuera veneno no afectaría y si fuera medicina, no sanaría…

Dramático pero cierto!

Es este el estado de la iglesia?

Lamentablemente en muchas sí!

Qué nos está pasando?

Creo que lo que nos está ocurriendo es tan simple como doloroso: En lugar de cumplir con el Mandato de Jesús de influir al mundo, estamos permitiendo lo contrario, que el mundo nos influya.

Ni los grandes templos, ni los grandes espectáculos que se montan en las iglesias durante el desarrollo de los cultos, son capaces de esconder la realidad.

Piense Ud. como lo hice yo?

Cuánto hace que en su iglesia, no se habla de pecado?

Solamente con esta pregunta basta para comprender que estamos haciendo con la Iglesia de Cristo!

Es tan superficial todo lo que hacemos, lo que predicamos, que con mucha lógica tiene razón quién recuerda que si fuéramos un veneno no afectaríamos a nadie y si fuéramos una medicina, no sanaríamos a nadie.

Es tiempo de reflexión!

De volver a la Fuente!

De volver a Jesús!

Apocalipsis 3:15-16

Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. !!Ojalá fueses frío o caliente!

Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca.

Apocalipse 3:15-16

Eu sei as tuas obras, que nem és frio nem quente. Tomara que foras frio ou quente!

Assim, porque és morno e não és frio nem quente, vomitar-te-ei da minha boca.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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LO FÁCIL…

Nuestra tendencia es intentar siempre lo que nos resulte lo más fácil, lo que nos demande el menor esfuerzo.

Como es lo natural, lo fácil ni siquiera lo apreciamos como algo que deberíamos cambiar, incluso con relación a las cuestiones  importantes.

De esta forma definimos una forma de vivir, una forma de proceder, que tiene bastante poco que ver con el esfuerzo que nos requiere la vida cristiana.

Con lo fácil, leemos cada vez menos la Palabra de Dios y con lo fácil, cada vez menos aplicamos en nuestros hechos cotidianos, la necesaria cuota de empeño que nos demanda el cumplimiento de nuestras obligaciones.

Lo cierto es que con esta forma de comportarnos nos perdemos las maravillosas promesas formuladas por el Eterno a los hombres.

Perdemos también la alegría de saber que estamos siendo fieles al Mandato de Jesús y nos conformamos cada día más, con pequeñas cosas, que no representan ni lejanamente lo que podríamos recibir.

Lo fácil, como lo cómodo, son las tentaciones que debemos enfrentar. Pero al hacerlo, ponemos nuestros pasos en el verdadero Camino, el Camino de Vida.

Proverbios 19:20

Escucha el consejo, y recibe la corrección,
Para que seas sabio en tu vejez.

Provérbios 19:20

Ouve o conselho e recebe a correção,

para que sejas sábio nos teus últimos dias.

Diego Acosta