EL CUMPLIMIENTO
El Ministerio Terrenal de Jesús comenzó en Galilea, en Nazaret que fue el lugar que eligieron sus padres María y José, para vivir.
Luego de ser conocido por los vecinos como el hijo del carpintero, fue a la sinagoga y allí fue invitado a leer un versículo del Antiguo testamento.
El pasaje elegido fue el de Isaías 61, versículos 1 y 2, que fueron leídos por el Hijo del Hombre de esta manera:
El Espíritu del Señor está sobre mí,
Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres;
Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón;
A pregonar libertad a los cautivos,
Y vista a los ciegos;
A poner en libertad a los oprimidos;
A predicar el año agradable del Señor.
El propio Isaías destacó la importancia de estas palabras que fueron dirigidas por Jehová al pueblo de Israel, que mucho había sufrido y que ahora recibiría la promesa de un nuevo Pacto Eterno.
De allí las palabras de Jesús al terminar la lectura:
Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros.
Esta rotunda afirmación que fue hecha por Jesús hace más de 1900 años, sigue teniendo plena vigencia en nuestros días.
ÉL vino a dar buenas nuevas a los pobres, que somos todos nosotros, que podemos recibirlas a través de los cuatro Evangelios.
También vino a traer sanidad a los quebrantados de corazón, para que podamos iniciar una nueva vida en su condición de Salvador.
Del mismo modo están vigentes sus palabras de que daría libertad a los que están cautivos del pecado, vista a los ciegos que no pueden ver el Milagro de la Salvación, libertad a los oprimidos por sus iniquidades y a traernos la Predicación del año agradable del Señor.
Impresionante Mensaje que debemos hacer nuestro para recuperar todo lo que hemos perdido a causa de nuestros pecados, de nuestra ceguera espiritual y a disfrutar de la sanidad que solamente ÉL puede darnos.
Atesoremos este Mensaje!
Lo guardemos como el más preciado tesoro, porque tiene los fundamentos del Ministerio de Jesús hecho Hombre!
Demos gracias por estas palabras, que son las mismas que usó el profeta Isaías cuando vino a anunciar un nuevo Pacto Eterno con quienes somos Su Pueblo.
Diego Acosta