Qué es la TORÁ?

Qué es la TORÁ?

ESCUDRIÑAR

La Torá es el Libro Sagrado del judaísmo, puesto que contiene las leyes y relatos fundacionales del pueblo y la entidad hebrea. Su traducción significa: teoría, enseñanza o doctrina.

Se corresponde con los cinco primeros libros de la Biblia, conocidos como Pentateuco y en ellos se encuentran las instrucciones, revelaciones y mandamientos que Jehová Dios entregó al Pueblo de Israel.

Por esta razón se lo considera depositario de la Ley sagrada y es el Texto fundamental para los judíos ortodoxos. Los cinco Libros fueron dictados punto por punto por Jehová a Moisés en el Monte Sinaí, en una fecha que se sitúa alrededor de comienzos del milenio anterior al nacimiento de Jesús.

Los estudiosos de la Torá sostienen que solo ellos son los idóneos para realizar una transcripción detallada y le dedican años al conocimiento en profundidad del idioma en el que fueron redactados los Libros.

La Torá es el documento que generalmente se regala cuando se funda una nueva sinagoga o cuando se la prepara para ser regalada a una nueva familia judía. Entre quienes dedican su vida a su conocimiento existen diferencias con relación a la fecha en que fue escrita.

En algunos de esos círculos se sitúa su redacción entre los siglos V y VI antes del nacimiento de Jesús, mientras que otros se decantan por el siglo IV o el II, siempre tomando como referencia al nacimiento del Hijo de Dios.

El primer Libro de la Torá es el de Bereshit o Génesis revela la Creación del mundo y la aparición del primer profeta de la antigüedad que es Abraham, de cuya descendencia conformaría el Eterno a su Pueblo.

Este Texto, que significa En el comienzo también narra la vida de otros hombres fundamentales de la nación hebrea:Jacob y su hijo José.El final del primer Texto revela la esclavitud que sufrieron los israelíes en Egipto.

Éxodo o Shemot, significa Nombres y en él se detalla como el pueblo judío adquiere su identidad, además de su unidad étnica. Razón por la que Jehová le dejó en el Monte Sinaí las leyes sagradas, himnos y oraciones.

El tercer Libro es el de Vayikrá o Levítico, que traducido significa ÉL llamó que hace alusión a los ritos y procedimientos ceremoniales. Identifica a los levitas y sacerdotes, como los protagonistas de su ejecución y cumplimiento.

El siguiente es Badmibar o Números que se puede traducir como En el desierto que refleja la vida en el Neguev, el cruce del Mar Rojo y finalmente la ansiada llegada a la Tierra Prometida, tras superar el Río Jordán.

El Libro final es el de Devarim o Deuteronomio, que se traduce como Estas son las palabras, y en él se revelan el discurso de Moisés al Pueblo judío antes de cruzar el Jordán, la vida y muerte del propio Moisés y la de Josué.

La Torá judía o la Biblia, es esencial para saber sobre los momentos cruciales desde la Creación, hasta la Tierra de Canaán, la Tierra Prometida.

Diego Acosta

negar a dios

NEGAR A DIOS…

 

DEVOCIONAL
Es relativamente fácil alejarse de Dios, porque en el ejercicio del libre albedrío, tenemos la facultad de tomas decisiones que incluyen esta tan gravemente importante.
Esto puede ocurrir por múltiples razones, todas engañosas y que nada tienen que ver con el Amor del Todopoderoso hacia nuestra vida.
Pero lo cierto es que lo hacemos, sin valorar las consecuencias que puede tener no contar con el Padre en cada uno de nuestros actos.
Sin considerar tampoco que estamos desechando la Misericordia que ÉL renueva cada día. Pareciera que un ataque de ceguera espiritual nos hubiera afectado.
Pero un día advertiremos que ya no contamos con el Poder del Soberano y entonces comenzarán los lamentos y la angustia.
Pero a pesar de nuestra indignidad, si nos arrepentimos ÉL nos recibirá con su Amor, pero debemos recordar que lo que no hará será librarnos de las consecuencias de nuestras malas decisiones.

Lucas 12:9 mas el que me negare delante de los hombres, será negado delante de los ángeles de Dios.

Diego Acosta / Neide Ferreira

carta abierta a unos padres

CARTA ABIERTA A UNOS PADRES

PERSONAL
Lamento desconocer sus nombres, pero sí tengo conocimiento de la dura prueba que están viviendo, ante la pérdida de una hija de doce años.
Doblemente dolorosa la prueba por sus circunstancias, ya que la niña falleció en un hospital, donde no fue atendida por los responsables que debían hacerlo.
En esta hora resulta muy necesario guardar el corazón para no culpar a Dios por lo sucedido y también para perdonar a quienes fracasaron en el ejercicio de su profesión, pues no prestaron atención a una niña con evidentes síntomas que revelaban su gravedad.
Oramos por ustedes para que el Consuelo que solo el Todopoderoso puede brindar, se manifieste en vuestras mentes y también en vuestras almas. Como padre y abuelo comprendo la angustia y comparto el dolor. Que Dios tenga compasión por vuestras vidas y sobre la existencia de quienes son responsables de una pérdida terrible.
Los saluda con amor, su prójimo.

Diego Acosta