El profeta Eliseo ayuda a la viuda que está a punto de perdera dos de sus hijos, pues un acreedor los tomará como siervos. Eliseo, le ordena que busque vasijas y las llenecon el único aceite que tenía en su casa. El milagro de la multiplicación debe hacernos reflexionar acerca de la Provisión de Dios.
Ha pasado más de un cuarto de siglo desde el momento en que acepté al Señor como mi Salvador y me sigue sorprendiendo la actitud que tienen muchos creyentes sobre Job.
Este Libro muestra como la lucha de Dios contra Satanás, siempre se resolverá a favor del Creador, aunque permita las circunstancias tan tremendas que le tocó vivir al protagonista.
Debemos por tanto, reflexionar acerca de que en el mundo espiritual se viven situaciones que no conocemos, pero que nos pueden afectar, poniendo a prueba la intensidad de nuestra fe.
Precisamente, este puede ser el punto por el que tantos creyentes no quieren saber mucho de Job, porque en el fondo todos tememos que nos ocurra lo que a él.
Sin embargo, debo pensar que en la Soberanía del Eterno, está comprendida mi propia existencia, por lo que todo lo que me ocurra finalmente será para mi bien. Porque solo ÉL puede transformar lo malo en bueno.
Job 1:12 Dijo Jehová a Satanás:
He aquí, todo lo que tiene está en tu mano;
solamente no pongas tu mano sobre él.
Y salió Satanás de delante de Jehová.
Jó 1:12
E disse o Senhor a Satanás:
Eis que tudo quanto tem está na tua mão;
somente contra ele não estendas a tua mão.
E Satanás saiu da presença do Senhor.
Nuestra generación está siendo convulsionada por la peste que genera tensiones, dudas y también incertidumbre. La placidez y la armonía
que la Creación de Dios nos brinda, nos alienta a pensar que todo está bajo su control. Es bueno y propicio, que reflexionemos sobre esto!
Resulta sorprendente la explicación que ha dado China, para justificar la destrucción de muestras del corona virus, que se realizaron durante el transcurso del mes de enero.
El supervisor de la Comisión Nacional de Salud, señaló que la medida fue adoptada por seguridad de los laboratorios no autorizado s y para prevenir desastres futuros por patógenos no identificados.
Surge una pregunta: Por qué no se impidió que los laboratorios realizaran operaciones que eran ilegales?
Las otras explicaciones del supervisor de la Comisión Nacional de Salud de China, estuvieron dedicadas a que la destrucción no se realizó para encubrir u ocultar muestras a otros países, sino por cuestiones de bioseguridad.
En ese sentido aclaró que las destrucciones de muestras del corona virus, cumplen con las leyes sanitarias chinas, que obligan a que los laboratorios que no cumplan los requisitos necesarios, deben destruir las muestras que posean.
Otra pregunta: Si hubo laboratorios que tenían muestras que fueron destruidas, por qué no fueron clausurados oportunamente?
Al margen de las acusaciones que ha recibido China, por su negativa a informar sobre la peste del corona, las explicaciones sobre la destrucción de muestras, son tan ambiguas como difíciles de admitir.
Pero, como nos anuncia la Palabra de Dios, nada permanecerá oculto.
<< En estos tiempos tan difíciles que vivimos los malvados siguen acechando con sus obras buscando lucros desmedidos o estafando y mintiendo. Los hacedores de maldad pueden librarse de la justicia humana, pero no se librarán de la Justicia de Dios. Diego Acosta – CHRISTIAN RADIO
Hay dos tendencias que arraigan en lo más hondo de cada uno y de todos: el deseo de libertad por una parte, y la necesidad de cuidado y de tutela por otra parte.
Los desequilibrios hacia cualquiera de los dos polos producen anarquía, o autoritarismo, según predomine una libertad puramente egoísta que no reconozca el derecho de los demás, o una voluntad de sometimiento total, que borre cualquier esbozo de emancipación.
En estos momentos dramáticos para el mundo, esa puja, libertad total o total tutela, se acentúa en su pendularidad y, por momentos, se vuelve efectivamente extrema. Aparecen libertarios ilimitados que refutan la cuarentena y toda forma de control social y, por oposición, irrumpen los que pretenden un Estado absoluto y absolutamente controlador.