EL ÚLTIMO MES

PERSONAL

Nos quedan pocos días para terminar el año y es tiempo de analizar lo pasado y pensar en todo lo que hicimos y lo que dejamos de hacer.

Qué cosas podemos enmendar?

Qué cosas tenemos que perdonar?

Qué cosas nos deben ser perdonadas?

Muchas preguntas y poco tiempo para las respuestas. En lo que de nosotros dependa, no dejemos pasar ni un minuto en poner en práctica lo que sería bueno para acabar el año.

Fue un año bueno?

Complicado seguro, para algunos habrá sido el año del reencuentro con la familia, para otros, el de haber perdido precisamente la institución que Dios estableció.

Y también habrá quienes han llorado mucho por las dolorosas pérdidas, pero tanto unos como otros teniendo a Jesús en el corazón, todo habrá sido diferente.

Pensemos en quienes se rebelan, se resisten, niegan la existencia del Eterno y lo rechazan para sus vidas. Oremos por ellos y clamemos para que no nos ocurra lo mismo que a ellos.

El 2020 nos ha acercado al final de los tiempos. Y demos gracias por haber podido ser sus testigos.

Diego Acosta

LOS REBELDES

DEVOCIONAL

Cuando escuchamos decir que la historiase repite, estamos ante una de las grandes verdades que rodean la vida de los humanos.

Jehová reprochó al pueblo de Israel por haberse rebelado contra su Autoridad y lo mismo nos puede decir en estos días, como una prueba concluyente que el corazón de los hombres es el que alberga la maldad.

Por qué oscuras razones obramos de esta manera?

No es casual a pregunta, porque la actitud humana parece regida por las tinieblas y por el diablo que las habita y las rige. Y su influencia parece extenderse cada día más.

De allí la necesidad de buscar la Luz, como las que en un túnel nos permite adivinar donde está la salida. Como es natural me incluyo en los malos comportamientos.

Solo la Grandeza del Eterno nos libra de ser fulminados por tanta rebeldía sin sentido y por tanta soberbia vana. Solo cabe pedir perdón y apelar a la Misericordia del Poderoso para volver a llamarnos sus hijos.

Jeremías 2:31
ES!Oh generación! atended vosotros a la palabra de Jehová.
¿He sido yo un desierto para Israel, o tierra de tinieblas?
¿Por qué ha dicho mi pueblo:
Somos libres; nunca más vendremos a ti?

PT  Ó geração! Considerai vós a palavra do Senhor.
Porventura, tenho eu sido para Israel um deserto?
Ou uma terra da mais espessa escuridão?
Por que, pois, diz o meu povo:
Desligamo-nos de ti; nunca mais a ti viremos?

Diego Acosta / Neide Fereira

El Día de Acción de Gracias

En América del Norte, Estados Unidos y Canadá
se conmemora el agradecimiento
por lo recibido en el último año

según la tradición, por el resultado de las cosechas.
Los hombres debemos dar gracias al Eterno,
por todo, porque siempre será lo mejor para nosotros.
Diego Acosta – BLOG DEL TIEMPO

EL JOVEN DIEGO

BLOG DEL TIEMPO

Conocí a Maradona en el año 1983 en Barcelona, pues se me había encomendado que opinara sobre un proyecto, que resultó tan atractivo como irrealizable.

Cuando le confirmé los datos él me agradeció con desilusión, pero tenía la mirada alegre de un joven que comenzaba a mirar la gloria. Fue un poco tiempo antes que un miserable le destrozara un tobillo.

Lo volví a ver varios años después, pero sin poderlo saludar y pude apreciar que su mirada era la de un hombre que miraba la gloria cara a cara, pero sus ojos transmitían dureza y tristeza.

Lo que me hizo reflexionar acerca de lo que nos ocurre a los humanos cuando ansiamos, deseamos o buscamos la gloria que conceden otros hombres.

Siempre tendrá la dimensión pequeña que todos tenemos, por eso precisa de la desmesura, la grandilocuencia o la exageración. Olvidando lo que la Biblia nos advierte acerca de hacernos dioses, que como todos los dioses humanos son falibles y también perecederos.

El Único Dios verdadero, el Dios de Israel, está infinitamente por encima de cualquier dios humano, por ser Eterno y Todopoderoso. Con esta certeza me recuerdo del joven Diego, con su mirada alegre, tan distinta de cuándo conoció la gloria de los hombres.

Diego Acosta

LA HONRA HUMANA

 

DEVOCIONAL

Tristemente los hombres buscamos cada día, la honra que nos pueden conceder otros hombres.

Tristemente porque nos afanamos en lograr que nos distingan otros hombres que tienen las mismas limitaciones, las mismas ambiciones, las mismas miserias.

Y esta pequeña visión que tenemos de nosotros mismos, es la que ambicionamos como algo importante para nuestra vida y en ese altar ofrendamos derechos y humillaciones.

Sabiendo esto, pido perdón por hacer lo mismo a pesar de que me considero hijo de Dios y cometo la indignidad de buscar el reconocimiento de otros hombres iguales a mí.

Solo el Eterno es el que concede la honra y ningún hombre si no fuera por su Gracia, estaría en condiciones de recibirla.

Pido perdón por mí y por quienes pavoneándose, se consideran mejores que los demás, más importantes que el resto y en realidad no somos otra cosa que pobres hombres que vivimos por la Misericordia del Supremo.

Proverbios 29:23
La soberbia del hombre le abate;
pero al humilde de espíritu sustenta la honra.

Provérbios 29:23
A soberba do homem o abaterá,
mas o humilde de espírito obterá honra.

Diego Acosta / Neide Ferreira

CLAMOR A DIOS

DEVOCIONAL

Los hombres podríamos decir que diariamente pedimos cosas a Dios, oramos por nuestras necesidades y esperamos y deseamos que nuestras peticiones se vean cumplidas.

Es cierto que muchas veces oramos por cuestiones inauditas que solamente la Misericordia del Eterno puede perdonar y puede olvidar para no tenerlas en cuenta, con relación a nosotros.

Pero hay otras ocasiones en donde además de orar, varios hermanos nos reunimos para levantar un clamor ante el Supremo, para que las voces lleguen hasta su corazón.

Sabemos que sus Designios son insondables y que tiene Autoridad sobre todo y sobre todos, pero hay situaciones donde es necesario clamar para que su Misericordia y ayuda llegue hasta el lecho de un enfermo.

Hemos levantado un clamor por muchos hermanos y renovamos ese pedido especial por otra persona que está sufriendo y que está sumiendo a su familia en un doloroso tiempo de espera.

Te clamo Señor, por esa vida!

2 de Samuel 22: 7
ES-
En mi angustia invoqué a Jehová, y clamé a mi Dios;
ÉL oyó mi voz desde su templo,
y mi clamor llegó a sus oídos.

PT – Estando em angústia, invoquei ao Senhor e a meu Deus clamei;
do seu templo ouviu ele a minha voz,
e o meu clamor chegou aos seus ouvidos.

 

Diego Acosta / Neide Ferreira

EL HOTEL DE ORO

ANTIVIRUS

En la capital de Corea del Norte se ha inaugurado un hotel que está chapado en oro, en sus lugares más emblemáticos.

Como en otros lugares del mundo se hace una ostentación indigna pensando en el valor del oro y en el uso que en casos como este, superan lo razonable.

Usar el oro en el caso específico de Corea del Norte, para exhibir un nivel de riqueza muy alto, se contradice con la realidad que vive el país, donde la mayor parte de la población está bajo los umbrales de la pobreza.

Esta situación nos debería hacer reflexionar acerca de cómo obramos los humanos y también para no caer en el facilismo de la crítica, que sería pensar cuántas familias podrían comer adecuadamente con ese oro.

Se trata de pensar que cualquier forma de ostentación ofende la Majestad de Dios e ignora la humildad con la vivió su Hijo, cuando estuvo entre los hombres.

Diego Acosta