QUIENES SON LOS HIPÓCRITAS

ESCUDRIÑAR

Básicamente el concepto de hipócrita se relaciona con las personas que con sus expresiones se oponen a sus hechos. De allí la importancia de las palabras de Jesús hacia sus discípulos.

Cuando los llamó hipócritas basándose en los conceptos del profeta Isaías, cuando afirmó:
Este pueblo de labios me honra;

Mas su corazón está lejos de mí.

El origen de la hipocresía posiblemente sea tan antiguo como el hombre mismo, porque seguramente siempre hubo hombres que obraron como hipócritas.

De esta manera de puede identificar a los engañadores, mentirosos, falsos, impostores, farsantes y por simbología bíblica podríamos mencionar a los fariseos y también a los escribas.

La primera cita a los hipócritas la podemos encontrar en la Biblia, en el Libro de Job 36:13, cuando Eliú uno de sus amigos habla sobre la Grandeza de Dios: Mas los hipócritas de corazón atesoran para sí la ira, y no clamarán cuando él los atare.

Como es comprensible, la hipocresía afecta gravemente la relación entre las personas y por supuesto mucho más, cuando se convierte en una práctica en las congregaciones.

Resulta muy importante que quienes se comportan como hipócritas puedan ser amonestados según lo que enseña la Palabra de Dios, porque los primeros damnificados son ellos mismos.

Jesús en Mateo 6:5 es categórico con relación a estas personas que contaminan con sus malas actitudes: Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.

Lo opuesto a lo hipócrita es lo sincero.

Diego Acosta

YO HIPÓCRITA…TÚ…

CONGREGACIÓN

SÉPTIMO MILENIO 

Una admirada maestra nos sorprendió con un argumento que nunca nos habíamos imaginado.

Ella dijo que en muchas ocasiones lo mejor que podríamos hacer es leer la Biblia, pero en primera persona.

Con su humilde sabiduría nos guió en torno a esta nueva visión y desde entonces es algo que hago con suma frecuencia.

Leyendo como hacemos siempre, determinadas situaciones y las amonestaciones que ellas provocaban, me producían la errónea sensación que se trataba de otras personas, entre las que naturalmente no me incluía.

Si la Biblia hacía referencia a un caso de falta de humildad, yo pensaba que no era mi situación y seguía leyendo tratando de entender lo que doctrinalmente se enseñaba.

Pero cambiando el tiempo de verbo y leyendo en primera persona, no solo se modifica la forma de leer sino que también se modifica la forma de entender.

Percibimos que no estamos hablando de los problemas de las actitudes de Elí con sus hijos, por poner un ejemplo, sino que estamos recibiendo instrucción acerca de nuestros hijos.

Ya no hay terceras personas sino que directamente somos nosotros, en lo individual, que debemos afrontar tanto las lecciones como las consecuencias que de ellas se derivan.

Confieso que este ejercicio me resultó apasionante y a la vez muchas veces me deja en evidencia frente a cosas que digo y que hago que están profundamente erradas.

Tal vez uno de los ejemplos más sorprendentes de esta enseñanza, sea leer y volver a leer los pasajes en los que Jesús llamó hipócritas a sus discípulos.

Si cambiamos el tiempo de verbo y lo ponemos en la primera persona del singular, advertiremos que la cuestión tiene un contenido tan personal, que debo aceptar que efectivamente… soy hipócrita.

También lo eran los discípulos pero también lo soy yo y la amonestación del Dios hecho hombre, no solamente estaba dirigida a ellos sino también a mí, que me considero o busco ser otro discípulo.

Indudablemente estamos frente a una cuestión que debe ser analizada profundamente y sobre todo, examinada a partir de nuestra propia conciencia.

Hablando con el Eterno, decirle que asumo mi condición de hombre imperfecto y que por tanto asumo también las amonestaciones que me harán crecer.

Diego Acosta

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COMO HABLABA…?

En estos tiempos en los que buscamos ser amables y agradables con todo el mundo, bueno sería recordar como hablaba Jesús.

En su Ministerio Terrenal, ÉL siempre fue contundente, radical, aún cuando usaba las parábolas, siempre sus expresiones fueron ROTUNDAS.

Nosotros en cambio, antes de llevar cualquier mensaje, pensamos a quienes va a molestar, quienes se pueden sentir ofendidos o si es oportuno que la congregación escuche palabras muy duras.

Nunca o casi nunca somos fieles a la Palabra que debe traer el Espíritu Santo. Nuestra fidelidad está dirigida cuidar nuestros mezquinos intereses personales.

Estos pensamientos vienen a mí, cada vez que escucho o leo un mensaje, donde resulta evidente que se trata de una palabra con un gran trasfondo humano y con nada o casi nada de inspiración del Espíritu.

Es evidente que cada uno debe hacerse responsable de sus hechos y de sus dichos. Pero también es evidente que cada congregación debe demandar con orden y misericordia, palabras fieles a Dios y no a los hombres.

Marcos 7:6

ES – Respondiendo él, les dijo: Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, como está escrito: Este pueblo de labios me honra, mas su corazón está lejos de mí.

PT E ele, respondendo, disse-lhes: Bem profetizou Isaías acerca de vós, hipócritas, como está escrito: Este povo honra-me com os lábios, mas o seu coração está longe de mim.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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DENUNCIA…!

Cuando hablamos del Evangelio en el fondo de lo que estamos hablando es de Jesús, que fue su proclamador.

Por ello podemos decir, que el propio JESÚS DENUNCIA:

…A los mercaderes de su Palabra,

así como lo hizo en el Templo cuando expulsó a quienes lo profanaban con su comercio.

…A los hipócritas,

así como lo hizo con los propios discípulos cuando los acusó de algunas de sus actitudes contrarias a lo que ÉL mismo les enseñaba.

…A los tibios,

así como lo denunció a los miembros de la iglesia de Laodicea, a quienes anunció que Dios los vomitaría de su boca.

Ciertamente en los tiempos que corren hablar del Evangelio me resulta incómodo, porque el primero en ser perturbado soy yo mismo.

Porque en el nombre de la Misericordia, justifico todo, aún lo más injustificable, obrando como lo harían los fariseos y los escribas.

O defendiendo los supuestos derechos de los líderes, para tratar de sacar provecho de los débiles, en lugar de servirlos como vino a hacer el propio Jesús.

Acaso buscar ser servido no es lo contrario de lo que predicó el Hijo del Hombre?

Como puedo hablar de su Iglesia, si estoy más preocupado porque se la conozca por sus comodidades, en lugar de por el rigor de la Palabra que se expresa desde el púlpito?

Esta denuncia de Jesús es directa y sin atenuantes!

No puedo argumentar ni desconocimiento ni error en la interpretación, porque fue ÉL mismo quién se explicó a través de los Textos Sagrados.

La cuestión ahora, es cómo comportarme, sabiendo que sobre mí pesa una grave DENUNCIA del propio Jesús!

Marcos 10:45

ES – Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir,

            y para dar su vida en rescate por muchos.

PT – Porque o Filho do Homem também não veio para ser servido,

            mas para servir e dar a sua vida em resgate de muitos.

Diego Acosta / Neide Ferreira