LAS AMARGAS DERROTAS

DEVOCIONAL

Pocas cosas me resultan más conmovedoras que escuchar a un hombre declarar que su vida es una simple y amarga historia de derrotas.

Es muy difícil dar alguna respuesta a una declaración tan llena de sufrimiento y también de realidad. Analizando su pasado y su presente con los ojos del mundo, no había nada de exagerado en lo que había comentado.

Y con los ojos del mundo también se podría decir, que tampoco había nada de ejemplar en lo que se suponía eran años y años de luchas y de derrotas.

Sin embargo en medio de mi conmoción, recordé mi propia vida. Tal vez hubiera tenido en el pasado, muchos puntos en común con lo de aquel hombre.

Pero le comenté como mi existencia había cambiado por causa de creer en Jesús. Así de simple, como es la Verdad, cuando sintetiza todo lo bueno que dio a mi vida el Hijo del Hombre.

Salmo 18:35
ES –
Me diste asimismo el escudo de tu salvación;
Tu diestra me sustentó,
Y tu benignidad me ha engrandecido
.

PT – Também me deste o escudo da tua salvação;
a tua mão direita me susteve,
e a tua mansidão me engrandeceu.

Diego Acosta / Neide Ferreira

FALSO O FALSO

ANTIVIRUS

La antigua opción de Verdadero o Falso, la estamos reemplazando por otra que es más dramática y perversa.

Se trata de que en estos tiempos la opción ha cambiado para falso o falso…sencillamente porque las alternativas que se ofrecen ignoran totalmente lo verdadero.

Si prestamos atención a los mensajes que recibimos advertiremos que la Verdad cada vez está más lejana de la realidad y nos debatimos entre anuncios que la niegan constantemente.

En los difíciles tiempos de la peste esta mutación, para utilizar un término de actualidad, cuando se afirma algo y luego se lo niega, se trata siempre de cuestiones que tienen en común que ninguna es verdadera.

Por esta razón es que debemos acudir a la Palabra de Dios, para recordar que nos manda escudriñar todo lo que llega hasta nosotros, en cualquier forma de mensaje.

Solamente así podremos rescatar el sentido de lo Verdadero o de lo falso y no dejarnos envolver por el cruel falso-falso.

Diego Acosta

ENGAÑAR ES PECAR

DEVOCIONAL

La aplaudida actitud de ser tolerantes lleva a la sociedad a consentir todo o prácticamente todo. Porque pareciera que la cuestión es: Si te parece bien hazlo.

Entre tantas cosas admitidas, están los engaños o los pequeños engaños, que se comparan con las pequeñas mentiras o las mentiras piadosas o las semi verdades.

Esa tolerancia nos induce a olvidar que tanto el engaño como cualquier forma de mentira, por pequeña que sea o que busque la indulgencia de su propósito, siempre será una mentira.

Engañar, mentir está en contra de lo que Dios ha establecido como normas de vida para los hombres, para que vivamos mejor y para que seamos fieles a quién es Santo.

Cada vez que estoy a punto de engañar a alguien, aunque sea una cosa pequeña o realmente menor, no me olvido que eso es igual a una pequeña mentira.

Y la mentira siempre será mentira y la Verdad, siempre será Verdad.

Que la influencia del mundo no me haga rebelar contra el Eterno!

Job 27:4
Mis labios no hablarán iniquidad,
Ni mi lengua pronunciará engaño.

27:4
Não falarão os meus lábios iniquidade,
nem a minha língua pronunciará engano.

Diego Acosta / Neide Ferreira

ORACIÓN – Por Liberación

Oremos para que el Espíritu libere las mentes!
Oremos para que el Espíritu libere los corazones!
Oremos para que el Espíritu muestre las mentiras!
Oremos para que el Espíritu revele los engaños!
Oremos para que el Espíritu muestre la Verdad!
Oremos para que el Espíritu muestre al Dios Verdadero!
ORACIÓN

Rigor científico…?

ANTIVIRUS

Constantemente los especialistas en cuestiones espaciales, nos sorprenden con sus revelaciones, que por nuestra falta de memoria, no advertimos que luego las contradicen.

En otras ocasiones nos hablan de dimensiones tan gigantescas, que las magnitudes escapan por completo a nuestra capacidad para imaginarlas, pues suponen una cantidad de ceros a la derecha que muchos no sabríamos ni expresarlas.

Es admirable la capacidad de los científicos para afirmar y desmentir supuestos descubrimientos, que luego quedan en la mayoría de los casos como interrogantes de difíciles comprobaciones.

Deberíamos aprender de los científicos, en esa capacidad de reflejar lo poco que saben sobre algunos temas y también su interés por desmentir sus afirmaciones erradas

Este ejercicio constante de afirmar-negar,  si lo aplicáramos a nuestra vida cotidiana, nos haría menos esclavos de nuestras propias palabras. Y podríamos evidenciar con nuestros hechos que la Única Verdad es la del Eterno. Y el Único que sabe todas las cosas…

Diego Acosta