LA HUMILDE ENSEÑANZA
Algunas flores sencillas y efímeras
nos dejan una gran enseñanza de humildad
en medio de la ostentación en la que vivimos,
y en la que nos mostramos
como el mundo quiere que seamos.
LA CREACIÓN
Algunas flores sencillas y efímeras
nos dejan una gran enseñanza de humildad
en medio de la ostentación en la que vivimos,
y en la que nos mostramos
como el mundo quiere que seamos.
LA CREACIÓN
DEVOCIONAL
Por circunstancias muy especiales, estaba yo cocinando para un querido amigo. Tenía los ojos llorosos y las manos impregnadas de olor a cebolla.
Tenía la sensación que lo que estaba haciendo era impropio de mí, porque entre otras cosas nunca haría ninguna comida que tuviera cebolla.
Como casi siempre el Espíritu me inquietó llevando mi pensamiento a las enseñanzas de Jesús: Por que me diste de comer cuando tuve hambre…
Una cuestión tan sencilla y cotidiana como es preparar una comida, se convirtió en una verdadera lección práctica de lo que realmente significa trabajar para el Prójimo.
No debe importarnos si lo hacemos bien o mal, ni tampoco si es de nuestro agrado. Simplemente lo debemos hacer porque es bueno para la otra persona.
Recordando esto, nos acercaremos a Jesús, que nos mostró con su mansedumbre y humildad, que significa servir al Prójimo. Maravillosa enseñanza que jamás debemos olvidar.
Marcos 12:31 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que estos.
Diego Acosta / Neide Ferrerira
Quién tiene el Poder sobre todos los hombres
y sobre todas las cosas que vemos y las que no vemos,
sobre el pasado y sobre el futuro?
Solamente Dios!
Solo ÉL nos puede dar Amor y Consuelo.
Diego Acosta – MENSAJE
CONGREGACIÓN
SÉPTIMO MILENIO
EL ABUELO SALOMÓN
La humildad y la mansedumbre son virtudes qué si son verdaderas, juntas pueden lograr grandes cosas, principalmente frente a los soberbios y también frente a los prepotentes.
Pero hay circunstancias en las que sí debemos obrar de otra manera y es cuando debemos levantar la voz por los que no tienen voz y por tanto no pueden ser escuchados.
También cuando debemos luchar por los derechos de los desposeídos que no tienen ninguna posibilidad de hacerlo por sí mismos.
Y también cuando debamos defender los derechos de los pobres y los necesitados, de los huérfanos y las viudas, de los más débiles entre los hombres.
Entonces sí deberemos levantar nuestra voz, porque tendremos en nuestro corazón la fuerza que solo pueden conceder la mansedumbre y la humildad.
Levantemos nuestra voz, nunca para defender nuestras causas y siempre para ayudar al Prójimo.
El asombroso espacio exterior
nos confronta con nuestra pequeñez,
nos coloca en la verdadera dimensión que tenemos
que solo se justifica
porque somos las joyas de todo lo Creado.
Aprendamos esta lección que nos concede el Señor
para vivir con humildad.
LA CREACIÓN
CONSIGNA: SER PRUDENTES Y ECUDRIÑAR
<< LA AYUDA
Hace falta mucha humildad para recibir…!
Esta frase ilustra lo que ocurre en estos días difíciles.
Algunas familias muestran gratitud por los alimentos
y otras, ocultan con verguenza su necesidad de recibir.
Ayudemos a los agradecidos
y oremos por los que se ocultan.
Diego Acosta – CHRISTIAN RADIO
ANTIVIRUS
Dolorosamente podemos advertir como el espíritu de burla está presente en muchos momentos de la vida cotidiana, enturbiando relaciones y afectando a quienes son sujetos pasivos en estos casos.
Quién se burla generalmente se cree superior y por eso entiende que tiene derecho a comportarse de una manera prepotente, cargada de ironía y malas intenciones.
Es curioso como con cierta facilidad se puede trazar un forma de ser de quienes caen en la burla y también en la de quienes son objeto de estas actitudes.
Unos son los listos y otros los que pasan por ser los tontos del grupo, por ejemplificarlo de alguna manera. Pero la realidad es muy diferente de este planteamiento.
El que se cree listo, el más sabio o directamente el mejor, está cayendo en el grave error de sobredimensionar su propia valía y en subestimar la de los demás.
Por eso se burla!
Pero y si los burlados fueran más sabios que él?
Qué ocurriría si los burlados fueran verdaderamente humildes?
Si fueran más sabios seguramente entenderían las pequeñas motivaciones de un burlador. Y si fueran más humildes, comprenderían que es mejor ser burlado que convertirse en burlador. Porque el valor de la humildad, solo se mide por la dimensión del agravio que es capaz de soportar.
Diego Acosta