para el projimo

PARA EL PRÓJIMO

DEVOCIONAL

Por circunstancias muy especiales, estaba yo cocinando para un querido amigo. Tenía los ojos llorosos y las manos impregnadas de olor a cebolla.

Tenía la sensación que lo que estaba haciendo era impropio de mí, porque entre otras cosas nunca haría ninguna comida que tuviera cebolla.

Como casi siempre el Espíritu me inquietó llevando mi pensamiento a las enseñanzas de Jesús: Por que me diste de comer cuando tuve hambre…

Una cuestión tan sencilla y cotidiana como es preparar una comida, se convirtió en una verdadera lección práctica de lo que realmente significa trabajar para el Prójimo.

No debe importarnos si lo hacemos bien o mal, ni tampoco si es de nuestro agrado. Simplemente lo debemos hacer porque es bueno para la otra persona.

Recordando esto, nos acercaremos a Jesús, que nos mostró con su mansedumbre y humildad, que significa servir al Prójimo. Maravillosa enseñanza que jamás debemos olvidar.

Marcos 12:31 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que estos.

Diego Acosta / Neide Ferrerira

vete y no peques mas

VETE Y NO PEQUES MÁS

LOS APUNTES DE SALMA

Vete y no peques más, dijo Jesús en el libro de Juan capítulo 8. Tus pecados te son perdonados, tu Salvador no te condena, sino te hace nacer de nuevo. Borrón y cuenta nueva, dicen. Eres nueva criatura, a partir de ese momento el cielo se abre y verás la mano de Dios haciendo nueva cada área de tu vida. En Sus promesas hay abundancia de vida. Él es fiel y a su tiempo cumplirá Su palabra.
No te desanimes, hij@ mí@, cree en mí y confía en mis palabras. Búscame y me encontrarás, te estaré esperando, no tardes, dice Jesús tu Señor.

Salma Ferreira

poca fe

POCA FE

DEVOCIONAL

Invariablemente cuando recuerdo sobre la forma en que Jesús debía reprender a los discípulos, a causa de su poca fe, tengo un sentimiento de sorpresa muy grande.

Pero un día el Espíritu me advirtió acerca de mi actitud. Si yo estuviera en el lugar de los discípulos, la situación no sería la misma?

No me tendría que reprender el Hijo del Hombre, a causa de mi poca fe?

Estas preguntas me llevan a la conclusión de que es muy fácil ver los errores en las demás personas y tremendamente difícil verlos y aceptarlos en mi propia existencia.

Jesús es la Verdad y por eso amonestaba a quienes estuvieron durante años a su lado. Si no lo hubiera hecho, podría haber dejado en el ánimo de esos hombres sencillos, la idea de que eran especiales por estar a su lado…y además casi perfectos.

Exactamente como es mi caso. Soy sencillo, pero ni soy especial ni soy perfecto…soy un hombre que precisa ser amonestado cada día, a causa de mi poca fe.

Mateo 16:8 Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Por qué pensáis dentro de vosotros, hombres de poca fe, que no tenéis pan?

Diego Acosta / Neide Ferreira