EL SIMBOLISMO DE LA ESTRELLA DE CINCO PUNTAS

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LA OTRA HISTORIA

Varias culturas anteriores en su existencia a lo que podemos denominar genéricamente como cristianismo, utilizaban este símbolo.

Tanto los egipcios como los sumerios lo utilizaban para prácticas que tenían que ver con los cuatro elementos naturales, a los que había que agregar el espíritu, que sería el punto superior de la estrella.

En los ambientes de la brujería, también es utilizada para definir al supuesto dios de la luz y al dios de la oscuridad. Para los satanistas el punto superior de la estrella adquiere la representación del poder de la mente.

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La representación invertida de la estrella, también forma parte de las prácticas del ocultismo en algunas de sus manifestaciones.

Curiosamente también se usó la estrella de cinco puntos como una forma de luchar contra el mal, a pesar de todo lo expuesto.

En realidad esta simbología que se le atribuye a la estrella, nada tiene que ver con lo expuesto en la Palabra de Dios, sobre el significado del Bien y del mal.

En algún tiempo durante mediados del segundo milenio, hubo construcciones de la iglesia católica, especialmente las góticas que utilizaron la estrella, pero otorgándole un carácter difícil de explicar en estos tiempos.

Finalmente cabe destacar que muchas empresas con negocios en todo el mundo, utilizan la estrella, como un valor de atracción indirecto sobre sus usuarios y consumidores.

Diego Acosta

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INDALO O INDALA, OTRA FORMA DE IDOLATRÍA HUMANALA OTRA HISTORIA

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LA OTRA HISTORIA

Algunas civilizaciones con varios miles de años de antigüedad, utilizan el símbolo de una figura humana elemental sosteniendo con sus manos extendidas un arco.

En algunos casos se considera el Indalo o la Indala, un amuleto cuyo sexo sería femenino, por la ausencia de los atributos de la masculinidad.

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Hay antecedentes de la figura en Egipto, donde se la relaciona con la invocación para que no se registre un nuevo diluvio.

Algunas tribus naturales de Estados Unidos, los Sioux, los Hopi o los Cree, le atribuyen la condición de ser quién establece la unión entre lo físico y lo espiritual.

También le conceden la condición de ser el gran guerrero que conducirá al mundo hacia la libertad.

Se registran estas figuras en diversos lugares del mundo y todas con las mismas o parecidas características. También se le atribuye el mismo origen y motivación al dibujo de Da Vinci, sobre las proporciones según Vitrubio, de finalers del siglo XV.

En otros lugares, como el sur de España, se le concede al Indalo condiciones mágicas relacionadas con la suerte o con los pedidos de que no haya grandes lluvias.

Más concretamente en Almería se lo relaciona con san Indalecio, cuya festividad se recuerda los días 15 de mayo.

Lo cierto es que este símbolo, sobre cuyas propiedades existen diversas versiones, muchas de ellas contradictorias, no es otra cosa que el resultado de la imaginería popular y la consiguiente creación de un símbolo idólatra.

Evidentemente en total contradicción con el mandato de Jehová: No temeréis a otros dioses, ni los adoraréis, ni les serviréis, ni les haréis sacrificios.

Diego Acosta

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