LA CELEBRACIÓN DE LA MUERTE

dv10se15-2

Blog…del TIEMPO!

En este día en algunos lugares del mundo se hace alusión a los muertos y en otros, se exalta a la muerte e incluso se la califica de santa.

Es importante recordar un pasaje de la Biblia, Isaías 8:19:

Y si os dijeren: Preguntad a los encantadores y a los adivinos, que susurran hablando, responded:

¿No consultará el pueblo a su Dios?

¿Consultará a los muertos por los vivos?

Es evidente que el Creador ha prohibido cualquier relación con los muertos, invocarlos o intentar comunicarse con sus espíritus.

Por esta razón Isaías se pregunta: No consultarán los hombres a su Dios?

Y la siguiente formulación: Consultarán a los muertos por los vivos?

Que nos pueden decir quienes están muertos, sobre lo que estamos viviendo, sobre lo que estamos haciendo o sobre lo que ocurrirá en el futuro?

Si caemos en estas cuestiones es evidente que nos estamos alejando del Dios Verdadero. Estamos apelando al enemigo que se esconde en las tinieblas!

En este día oremos por quienes viven con un velo en sus ojos y en su corazón!

Oremos para que la Luz prevalezca sobre las tinieblas de su espíritu, de su corazón, de su mente y de sus pensamientos!

Jesús es la Vida y el Camino para la Vida Eterna!

Diego Acosta

www.septimomilenio.com

ESA VERDAD…

fanta1

Los años a algunas personas les aportan experiencia, a otros disgustos y a otros una cierta capacidad para evadirse de la realidad en la que viven.

Personalmente diría que los años me han servido para comprobar la cantidad de errores que se pueden cometer y de cómo la Gracia del Señor puede transformar la vida  oscura a la Luz.

Conversando con un amigo recordé un tiempo específico del pasado, en el que fantaseábamos con cambiar de país, de forma de vivir y hasta de pensar.

Solo que en la práctica esa forma fantaseosa de obrar, lo único que generaba era más frustración, porque no íbamos a ninguna parte y donde permanecíamos cada día estábamos peor.

Y esto me lleva a pensar en esa verdad…que no nos queremos confesar y que tratamos de soslayar para seguir intentando no ya de vivir sino de sobrevivir.

Personas que formaron parte de nuestro presente en otros años, ahora son igual de mayores que yo y siguen en la misma lucha cotidiana impregnada de proyectos irrealizables y lo que es peor, con un futuro más que previsible.

Todo, absolutamente todo, cambia cuando por la Gracia, el Señor nos llama a su lado. La cuestión radica en si escuchamos esa Voz o si nos seguimos escondiendo tras esa verdad a la que nos hemos acostumbrado.

Escuchar y aceptar el llamado es también una decisión personal. Algunos la escuchamos y otros la postergamos para otro momento.

Solo que intentar esconder la Verdad no es posible, para alguien que como yo, se vivía mintiendo. Que era la mayor de las mentiras!

2 Timoteo 4:4

y apartarán de la verdad el oído

y se volverán a las fábulas.

Diego Acosta / Neide Ferreira

www.septimomilenio.com

PREDICAR…?

precher-chandler

Jesús nos mandó a llevar el Evangelio hasta los confines de la tierra…!

A toda persona…!

Pero, es lo que hacemos?

Qué es lo que predicamos, que Evangelio llevamos, a quienes lo brindamos?

Es necesario que cómo punto de inicio para una reflexión, hagamos un acto de sinceridad profunda, primero con nosotros mismos.

Más de una vez me he preguntado: Qué estoy predicando?

Estoy predicando la Verdad de Jesús o lo que personalmente interpreto como verdad?

Estoy predicando que Jesús es la Luz del mundo o estoy interpretando que es la luz de la qué nos habló el Hijo del Hombre?

Estoy predicando sobre el valor de la Sal que habló Jesús o de lo que creo que es la salda para el mundo?

Qué estoy predicando?

Es hora que seamos más que honestos y pensar, como intento hacerlo, acerca del valor de mis palabras confrontadas con la Palabra de Dios.

No basta con las buenas intenciones, debo ser fiel al mandato de Jesús, pero sin los condicionantes que como hombre me planteo.

No debo agradar a nadie!

No debo ser obsecuente con nadie!

No debo aceptar condiciones de nadie!

La Única fuente de inspiración la predicación debe ser el Espíritu!

No debo caer en el chantaje personal, de condicionar lo que supuestamente presento como mensaje, bajo el peso de mis intereses, de mis conveniencias o de mis necesidades.

Predicar como nos mandó Jesús, significa alejarnos del mundo y acercarnos al Reino!

Todo lo demás será un triste remedo de los fariseos, que decían una cosa y hacían otras.

1 Corintios 1:17

Pues no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el evangelio; no con sabiduría de palabras, para que no se haga vana la cruz de Cristo.

Diego Acosta / Neide Ferreira

www.septimomilenio.com