Servir a Dios…!

CONSIGNA: SER PRUDENTES Y ESCUDRIÑAR

 

 <<< CONGREGACIÓN
SÉPTIMO MILENIO

Muchas veces nos engañamos diciendo que servimos a Dios
y en realidad nos servimos a nosotros mismos,
tratando de crear un dios personal lleno de vanidad y orgullo.
Dios nos quiere obedientes
y en la obediencia encontraremos Su Bendición.
Diego Acosta – MENSAJE

www.septimomilenio.com

OBEDIÊNCIA

CONGREGAÇÃO

SÉTIMO MILÊNIO

Fica uma pergunta no ar:
Como, a que, e a quem obedecer?
Vejo a obediência como uma atitude particular.
Não depende da opinião de ninguëm, mas de ninguém mesmo, só Daquele a quem eu devo obediência.
Pedimos muitos conselhos, inclusive a profissionais de aconselhamento, pastores, pais, amigos, etc…
Mas, creio eu, que dentro de nosso coração sabemos a quem e a que obedecer.
Disse Jesus: VÓS SEREIS MEUS AMIGOS SE FIZEREM O QUE VOS MANDO!
Ele é Nosso Amigo, e quer que sejamos Seus amigos.
Para ser seu amigo, temos que fazer o que Ele manda, assim de claro!
Além de obedecer, devemos também crer em SUAS PRECIOSAS PROMESSAS. Recordá-las, e crer que FIEL É O QUE PROMETEU, O QUAL TAMBÉM O FARÁ!
Se alguma promessa do Senhor não se cumpriu em nossas vidas, o problema deve ser nosso, porque ELE É FIEL, quem peca na infidelidade somos nós, levados por influências externas, concorda comigo?
Bem, esta é minha experiência…
Muitos, em certo tempo, me chamaram de louca, inclusive até eu me achava louca…rsrsrsrs
Espero que tenha sido por ser obediente…rsrsrsrs

Pra. Arlete Batista Ferreira

www.septimomilenio.com

 

OBJECIÓN…

Podemos negarnos a un mandato de Jehová?

Sí podemos, asumiendo las consecuencias que tiene la desobediencia al Creador de todas las cosas.

Moisés puso objeciones y cientos de años más tarde, también lo haría Jeremías. Pero tanto en un caso como en el otro, Dios ratificó que sus decisiones son inapelables.

Es llamativo el caso de Jeremías, a quién el Soberano anunció su decisión de convertirlo en uno de sus profetas.

Moisés declinó el mandato por ser un hombre mayor y también por ser torpe de lengua. Jeremías en cambio, defendió su situación con el argumento de la juventud.

Pero recibió una categórica respuesta!

Cada vez que este pasaje viene ante mi realidad, lo asumo como algo personal, porque me obliga a pensar sobre cómo reaccionaría si recibiera un mandato que no fuera el que yo podría esperar.

Y con el paso del tiempo, cada día comprendo más, que el principio de la Obediencia es del principio sobre el que se fundamenta la Bendición del Eterno.

Puedo pensar que el mandato no me gusta o que preferiría hacer algo diferente. Pero es un pensamiento pequeño como yo mismo soy, un hombre pequeño.

Además siempre miro por lo que mi mente considera que es lo bueno, pero me olvido que Dios siempre tendrá lo mejor para mí y para todos quienes acepten su Soberanía.

Jeremías recibió un duro mandato, con más precisiones para llevar advertencias  de Juicio que de buenos mensajes. Pero Jehová le prometió que siempre pondría palabras en su boca.

Y esa promesa es válida para él y también para mí y para todos.

Jeremias 1:7

 Mas o Senhor me disse: Não digas: Eu sou uma criança;

porque, aonde quer que eu te enviar, irás; e tudo quanto te mandar dirás.

Jeremías 1:7

Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño;

porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo que te mande.

Diego Acosta / Neide Ferreira

www.septimomilenio.com

LOS LÍMITES

Cuando leo el Antiguo Testamento y aprecio con qué minuciosidad Jehová administra los territorios de Su Pueblo, recibo una gran lección sobre los límites que les impone.

Evidentemente se trata de límites físicos, que son los que permitieron que las Tribus de Israel, pudieran no solamente convivir, sino también establecer sus propias normas y crecer.

No es acaso lo mismo que ocurre con las personas?

Algunos piensan, que los límites son los impiden a los hombres y a las mujeres desarrollar sus talentos, cuando en realidad es todo lo contrario.

Pienso que cuando obramos sin límites, lo que ocurre es que perdemos la libertad, porque inevitablemente somos cautivos de las acechanzas del mundo.

Somos víctimas del dinero, de la lascivia, de la vanidad y del caos, porque creyendo que cada vez somos más libres, lo que estamos haciendo es caer en un abismo tenebroso.

En la vejez de Josué, recibió de Jehová las instrucciones para que las Tribus pudieran ocupar los territorios que les asignó.

Y lo hizo con límites muy precisos!

Yo también tengo límites, que cada vez que trato de violentarlos, siempre termino lamentando mi torpeza y pidiendo perdón al Supremo para restaurar los daños.

Cada límite que me impongo y que impongo a mis hijos, es en realidad una defensa poderosa, primero contra mi propia persona, que no termino de someter a la Obediencia reclamada.

Cada vez que hablemos de límites, no caigamos en la tentación de evitarlos o de negarlos, porque entonces estaremos dando los primeros pasos en la dirección equivocada.

Nos estaremos alejando del verdadero Camino!

Josué 18:20

Y el Jordán era el límite al lado del oriente. Esta es la heredad de los hijos de Benjamín por sus límites alrededor, conforme a sus familias.

Diego Acosta / Neide Ferreira

www.septimomilenio.com