LAS DUDAS
Las dudas evidencian falta de fe,
que fue lo que Jesús le reprochó a Pedro,
porque no confió en ÉL
y se dejó arrastrar por lo que temía.
Hoy tristemente hacemos lo mismo.
Diego Acosta – MENSAJE
CONGREGACIÓN
SÉPTIMOMILENIO
Las dudas evidencian falta de fe,
que fue lo que Jesús le reprochó a Pedro,
porque no confió en ÉL
y se dejó arrastrar por lo que temía.
Hoy tristemente hacemos lo mismo.
Diego Acosta – MENSAJE
CONGREGACIÓN
SÉPTIMOMILENIO
DEVOCIONAL
Pertenezco al grupo de personas que tienen la certeza de que Dios siempre habla, pero que no lo escuchamos a causa del ruido ensordecedor en el que vivimos.
Ejemplificando estas palabras, me remito a contar que en el balcón de mi casa teníamos una planta que estaba mostrando evidentes síntomas de que se estaba secando.
No obstante un día con mucha paciencia, de la que casi carezco, le quité las partes muertas y entonces le dimos la oportunidad de que pudiera seguir viviendo.
Cuál no sería mi sorpresa, cuando comprobé que no solo que siguió viviendo, sino que siguió floreciendo, como si estuviera convencida de que debía perseverar para cumplir con el Propósito por el que fue Creada.
Asumí que el mensaje era para mí: Soy tan perseverante como esta humilde plantita? O me dejo llevar por el desánimo cuando nada parece salir bien?
Dios nos habla y en este caso, tengo la certeza que me dijo: Persevera.
Santiago 1:25
Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad,
y persevera en ella,
no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra,
éste será bienaventurado en lo que hace.
Tiago 1:25
Aquele, porém,
que atenta bem para a lei perfeita da liberdade e nisso persevera,
não sendo ouvinte esquecido, mas fazedor da obra,
este tal será bem-aventurado no seu feito.
Diego Acosta / Neide Ferreira
DEVOCIONAL Aunque parezca anticuado, todavía sigo usando los lápices de toda la vida, esos que para poder seguir escribiendo o dibujando, es necesario sacarles la punta de grafito que tienen. Y en eso he centrado mi atención. Como el orgulloso lápiz nuevo, va menguando a medida que deja sus trazos impulsado por mi mano.. Cada vez que es necesario sacarle la punta, el lápiz va perdiendo su aspecto, va disminuyendo de forma inexorable, porque de lo contrario no serviría para cumplir las funciones para las que ha sido creado. Tal vez los humanos, tengamos un cierto parecido con los lápices de siempre, porque para que cumplamos nuestro ciclo vital, tenemos que ir menguando, día tras día. La diferencia que pueda existir, es que en vez de ser un lápiz físico, fuéramos un lápiz espiritual. Seríamos utilizados como instrumentos por el Dios Todopoderoso e iríamos menguando a la vez que nuestras pequeñas obras se convierten en obs de fe. |
Santiago 2:14
Hermanos míos,
¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras?
¿Podrá la fe salvarle?
Tiago 2:14
Meus irmãos,
que aproveita se alguém disser que tem fé e não tiver as obras?
Porventura, a fé pode salvá-lo?
Diego Acosta / Neide Ferreira
ESTUDIO
BÍBLICO
Uno de los problemas principales de la confesión, es cómo y a quién hemos de confesar.
Santiago 5:16.
16Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados.
La Biblia nos habla de confesar al ofendido, por tanto si hemos ofendido a alguien debemos ir y reconocer nuestra falta delante de él. Siempre que ofendemos a alguien, también lo estamos haciendo con Dios.
Mateo 5:23-24.
23Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, 24deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda.
Para presentarte delante de Dios, debes de arreglar las cosas pendientes que tienes con tus cercanos. A veces queremos mostrarnos espirituales ante los demás y no hacemos lo que demostrará que realmente somos espirituales, estar en paz con todos.
1ª Juan 4:20-21.
20Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? 21Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano.
No podemos dejar correr nuestros pleitos con los hermanos y escudarnos en que amamos a Dios porque la Palabra dice claramente que entonces estamos mintiendo. Si tenemos cosas pendientes con nuestros semejantes las tendremos con el Señor.
Pr. Ramón Ubillos
DEVOCIONAL
Puede que en los tiempos en que vivimos se haya producido un profundo cambio en los gustos y comportamientos de las personas, para transformar todo en gris.
Este color es el resultado de mezclar el blanco con el negro!
Es decir: Dejamos de ser rotundos con estos colores, que representan lo opuesto y por tanto, bien pueden representar al SÍ y al NO, transformando su resultado equivalente en NI.
Este aparente juego de palabras no es ni remotamente lo que se nos enseña en la Biblia. Jesús dijo que el SÍ debería ser SÍ y el NO debería ser NO.
Por qué fue tan categórico el Hijo del Hombre?
Para ejemplificar que en nuestra condición de creyentes, deberíamos ser hombres y mujeres sin dobleces, sin doble ánimo y por tanto ser drásticos en nuestra vida cotidiana.
No podemos vivir en la ambivalencia que propone el mundo, porque es precisamente esa resbaladiza tendencia al gris, lo que le concede vigencia al NI, que tal vez sea una buena síntesis para negar a Dios.
Santiago 4:8
Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros.
Pecadores, limpiad las manos;
y vosotros los de doble ánimo,
purificad vuestros corazones.
Thiago 4:8
Chegai-vos a Deus, e ele se chegará a vós.
Limpai as mãos, pecadores;
e, vós de duplo ânimo,
purificai o coração.
Diego Acosta / Neide Ferreira
ESTUDIO BÍBLICO
Marcos 12:38-40.
38Y les decía en su doctrina: Guardaos de los escribas, que gustan de andar con largas ropas, y aman las salutaciones en las plazas, 39y las primeras sillas en las sinagogas, y los primeros asientos en las cenas; 40que devoran las casas de las viudas, y por pretexto hacen largas oraciones. Estos recibirán mayor condenación.
Jesús pone el ejemplo negativo de algunos escribas que buscaban en reconocimiento público y que luego intentan dar rienda suelta a sus concupiscencias, diciendo que estos obtendrían una mayor condenación, lo cual nos hace pensar que también en la condenación habrá diferentes posiciones.
Santiago 3:1.
1Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación.
Una vez más la Palabra nos habla de mayor condenación, poniendo ahora una condición peligrosa en el hombre, el ser maestro, que no quiere decir que no aceptemos el ministerio de maestro, sino que no seamos maestros de nuestras cosas. Muchos han enseñado doctrinas distintas de las que el Señor puso en su Palabra produciendo condenación hacía ellos y sus seguidores.
Tito 3:10-11.
10Al hombre que cause divisiones, después de una y otra amonestación deséchalo, 11sabiendo que el tal se ha pervertido, y peca y está condenado por su propio juicio.
Hay actitudes de personas que les ponen en una posición de condenación y una de ellas es la de causar divisiones, ya sea por matices doctrinales o por magnificar los defectos y los errores de unos contra otros en lugar de procurar la paz y el entendimiento.
Mateo 13:49-50.
49Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos, 50y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.
Tenemos que tener claro que al final del tiempo viene el juicio de condenación a este mundo, por ello debemos de procurar ser hallados dignos para no caer en ella.
Pr. Ramón Ubillos
ESTUDIO BÍBLICO
Existe un proceso en el pecado del hombre que comienza con la tentación, que hace mella en cada individuo en las áreas en que su propia concupiscencia se manifiesta (sus debilidades). Hasta aquí no hay pecado, pero cuando uno, de su voluntad, decide seguir la tentación entonces comienza el pecado que puede ser en deseo, acto u omisión.
Mateo 5:27.
27Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. 28Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón
La codicia ya produce, delante de Dios los efectos del pecado. Tanto la codicia como el odio, la envidia o la queja son actitudes pecaminosas del corazón.
Santiago 4:17.
17y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.
Dejar de hacer algo que sabemos que podemos para bien de otros es pecado, así aquellos hombres piadosos que pasaron delante del herido en la parábola del buen samaritano pecaron con su actitud de evitar compromiso en aquella situación.
Romanos 14:20-23.
20No destruyas la obra de Dios por causa de la comida. Todas las cosas a la verdad son limpias; pero es malo que el hombre haga tropezar a otros con lo que come. 21Bueno es no comer carne, ni beber vino, ni nada en que tu hermano tropiece, o se ofenda, o se debilite. 22¿Tienes tú fe? Tenla para contigo delante de Dios. Bienaventurado el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba. 23Pero el que duda sobre lo que come, es condenado, porque no lo hace con fe; y todo lo que no proviene de fe, es pecado.
La medida correcta para saber cuando hay pecado o no en algo, está en la fe que tenemos en hacerlo, si realmente guiados por el Espíritu (que es el que da fe) tenemos fe para hacer algo, tendremos libertad para hacerlo, mas si hay duda entonces se cumple la palabra “lo que no proviene de fe es pecado”
Pr. Ramón Ubillos
ESTUDIO
BÍBLICO
Génesis 1:27.
27Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.
Dios crea al hombre a la imagen de Dios y por lo tanto sin pecado, y el hombre comienza a vivir en el mundo sin pecado.
Romanos 5:12-13.
12Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron. 13Pues antes de la ley, había pecado en el mundo; pero donde no hay ley, no se inculpa de pecado.
Por el pecado de Adán y Eva entró el pecado en el mundo y de ellos a los demás. No es cuestión de echarles la culpa a ellos, pues cada uno peca por su propia voluntad, el hecho es que desde ellos la humanidad está sujeta al pecado. Curiosamente el pecado es anterior a la ley, por lo tanto no podremos decir que el pecado es transgresión de la ley, aunque la transgresión de la ley es pecado.
Santiago 1:12-15.
12Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman. 13Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie; 14sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. 15Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte.-
Pastor Ramón Ubillos
Un viejo y añorado maestro hablaba a propósito de la importancia de aprender, todos los días, un poco más sobre la Biblia.
Siempre fue un hombre directo, sin caer en el ejercicio de dejar sugeridos argumentos, que podían dar lugar a interpretaciones equivocadas.
Con ese estilo, una tarde inolvidable nos sorprendió con una afirmación. Se refirió a la humildad y a la importancia que tiene en la vida de los creyentes.
Pero dijo algo más: La humildad es un obstáculo casi insuperable cuando no está en el corazón de quién recibe la enseñanza.
Y agregó: Pero también la humildad es un obstáculo casi insalvable, cuando no está en el corazón de quien imparte la enseñanza.
Tanto en un caso como en el otro, la importancia de la humildad es tan grande, que la mayoría de las veces grandes maestros y aventajados alumnos, no llegan a la profundidad de la Palabra de Dios, por su falta de humildad.
Desde entonces, me aplico la enseñanza y oro para no ser vanidoso al enseñar y orgulloso cuando me enseñan.
Santiago 4:10
Humillaos delante del Señor,
y ÉL os exaltará.
Tiago 4:10
Humilhai-vos perante o Senhor,
e Ele vos exaltará.
Diego Acosta / Neide Ferreira
CONGREGACIÓN
SÉPTIMO MILENIO
Santiago 3:5-6
5 Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, !cuán grande bosque enciende un pequeño fuego!
6 Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno.
Era un experto en repetir las habladurías que llegaban a sus oídos. “Lo malo no es, dijo el maestro, que las repitas, sino que cada vez lo hagas con mayor maestría”.
La lengua es un miembro pequeño, pero puede mucho. Es cierto, con la lengua damos vida o matamos, ponemos alas en el otro o lo hundimos. La palabra es creativa o destructiva, según se la use.
Una palabra agradable, dicha en el momento oportuno, ilumina toda la existencia y ayuda a caminar. La palabra sabia orienta; la palabra cariñosa levanta y da ánimo; la palabra amorosa es fuente de energía y de bendición. Basta una sola palabra de vida para que la sanidad ocurra al instante en quien la escucha.
Basta, sin embargo, una palabra hiriente para que el veneno del odio y el resentimiento aniden en el corazón. Basta una sola palabra para crear discordia, para destruir una vida, para matar el amor.
Hablar es muy fácil; saber callar ya es algo más serio, requiere prudencia y dominio. Saber hablar a tiempo, en el momento oportuno, es salvación para quien necesita esa palabra de vida; saber callar cuando la otra persona no está preparada para recibir un consejo o un reproche, es sabiduría que no tiene precio.
De la vida de Cristo me llama la atención, precisamente, el uso que hace de la palabra. Fue sincero, leal, acostumbrado a llamar a las cosas por su nombre. Llamó al pan, pan y al vino, vino. Con sencillez enseñó a los discípulos a decir sí o no, según lo exigía la pregunta.
La palabra del Maestro fue amable, penetrante y convincente. Con ella, sanaba, levantaba, animaba y bendecía. Pero también con su palabra denunciaba la ceguera, la hipocresía, el mal. Él supo hablar para hacer el bien y supo callar ante las infamias y atropellos que le hicieron. Con su palabra encendía corazones y con su silencio desconcertaba al enemigo.
¿Cómo usamos la palabra?
Hay muchas personas que usan la lengua para hablar orgullosamente de sí mismos y mal de los otros. Hay quienes, como víboras, cada vez que abren su boca, arrojan veneno y muerden a los demás. Pero también lo hay que usan la palabra para consolar, para restituir la fama de los otros, para aclarar chismes, para hablar bien del prójimo y mejor aún de Dios.
Si esto sucede con el hablar, lo mismo acontece con el callar. Hay personas que callan por cobardía, por quedar bien, por no comprometerse. Hay personas que tienen la obligación de hablar, de denunciar la injusticia y la opresión, y callan e imponen, a su vez, un silencio sepulcral a los demás. Hay personas que se pasan toda la vida callados, simplemente por miedo, por cobardía, porque es más fácil, porque no tienen nada que decir. Sin embargo, los hay valientes que callan ante los defectos del hermano o cuando hablan bien de sí mismos o cuando son calumniados e injuriados.
Es importante aprender a hablar y a callar. Es una asignatura pendiente que tenemos todos los humanos.
Proverbios 16:23-24
23 El corazón del sabio hace prudente su boca, Y añade gracia a sus labios.
24 Panal de miel son los dichos suaves;Suavidad al alma y medicina para los huesos.
Proverbios 17:27-28
27 El que ahorra sus palabras tiene sabiduría; De espíritu prudente es el hombre entendido.
28 Aun el necio, cuando calla, es contado por sabio; El que cierra sus labios es entendido.
Pr. José Gilabert