voluntarios ejemplares

VOLUNTARIOS EJEMPLARES

DEVOCIONAL

En circunstancias muy especiales he podido disfrutar del trabajo de voluntarios, que forman parte de varias entidades de la ciudad en donde vivo.

Tal vez se podrían emplear otros calificativos, pero disfrutar significa apreciar la actitud de muchas personas, que se han volcado a servir al prójimo.

Como es natural me resulta muy difícil saber si estas personas son o no son creyentes, si tienen a Dios en sus vidas, pero sí puedo afirmar que tienen amor o misericordia por el necesitado.

Muchas veces cuando pienso en ser voluntario, me imagino grandes obras y grandes servicios, pero estos hombres y mujeres, me han enseñado que acercar un vaso de agua es algo maravilloso.

En la práctica se entiende perfectamente cuando Jesús enseñó, que ayudando al Prójimo es como darle un vaso a agua a ÉL mismo, otorgándole sentido a la condición superior del Amor.

Los voluntarios están impartiendo una gran lección de solidaridad, una ejemplar manera de romper con el frío indiferente de una sociedad, que como todas solo piensa en sus propios problemas.

Gracias por el ejemplo y gracias por la ayuda para comprender que la vida del creyente debe enriquecerse sirviendo al Prójimo, como enseñó el Hijo del Hombre.

Mateo 25:35
Porque tuve hambre, y me disteis de comer;
tuve sed, y me disteis de beber;
fui forastero, y me recogisteis;

Mateus 25:25
Porque tive fome, e destes-me de comer;
tive sede, e destes-me de beber;
era estrangeiro, e hospedastes-me.

 Diego Acosta / Neide Ferreira

otro milagro mas

OTRO MILAGRO MÁS…

DEVOCIONAL

Creo que por causa de mi incredulidad, Dios persevera generosamente en mostrarme las evidencias de su Majestad y de su Amor por los más débiles.

En un episodio francamente menor, clamé a su Autoridad para mejorar una situación que no era grave pero que me afligía.

Y así ocurrió.

De una manera imposible para la lógica humana y tras clamar por última vez, afronté la situación y con tremenda sorpresa y gran alegría comprobé una vez más el Poder del Eterno.

Lo que me afligía mejoró a pesar de mis dudas, lo que me hizo reflexionar acerca de lo que a veces pedimos al Señor y como su Misericordia se muestra obrando en nuestras vidas.

Nada hay más elocuente para quienes dudamos, que la evidencia del Poder del Altísimo que como viento recio borra todas las dudas y flaquezas y hace resplandecer su Majestad. Gracias y Gloria a ÉL por otro milagro más.

Efesios 6:10
Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor,
y en el poder de su fuerza

Efésios 6:10   No demais, irmãos meus, fortalecei-vos no Senhor
e na força do seu poder.
 

Diego Acosta / Neide Ferreira

el dios bueno

EL DIOS BUENO

DEVOCIONAL

Generalmente quienes se oponen al Eterno, le adjudican todos los males del mundo. El hambre, el dolor, las muertes brutales, las pestes y también los fenómenos naturales.

Esta lista de cuestiones que afectan a nuestra especie y a la propia Tierra, puede ser ampliada hasta límites insospechados.

Pocos son los que se detienen a pensar sobre esto. Por qué?

Creo que forma parte de nuestra naturaleza elegir siempre un culpable y si ese culpable no se puede defender de forma ostensible, la splución es perfecta.

Así como fue Adán y Eva fueron descargando su responsabilidad por haber pecado en el propio Dios. Tal vez por eso repetimos que el Creador es el culpable de nuestros males.

Olvidando que los pecados del mundo provocaron el Diluvio, porque el Altísimo nunca consentirá las malas obras, pero si tendrá Amor y Misericordia, el día que nos arrepintamos.

Jeremías 29:11
Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová,
pensamientos de paz, y no de mal,
para daros el fin que esperáis.

Jeremias 29:11
Porque eu bem sei os pensamentos que penso de vós, diz o Senhor;
pensamentos de paz e não de mal,
para vos dar o fim que esperais

Diego Acosta / Neide Ferreira

 

la obediencia de jesus

LA OBEDIENCIA DE JESÚS

Siempre hablamos del Amor supremo de Dios
de entregar a su Hijo
para consumar la Salvación de los hombres.
También es necesario recordar
la Obediencia suprema de Jesús

de entregar su Vida para cumplir el gran Propósito.
Diego Acosta – MENSAJE
CONGREGACIÓN SÉPTIMO MILENIO