EL ABATIMIENTO

EL ABUELO SALOMÓN

Se podría decir que se entiende cuando una persona se muestra abatida, con una profunda tristeza y con el lógico desánimo que provocan estos estados de ánimo.

La cuestión es saber que produce el abatimiento?

Si logramos conocer el origen podremos intentar una solución, aunque a veces resulte tan difícil y hasta poco probable. Pero la cuestión es intentarlo.

Las humillaciones públicas o aún las que se producen en el más estrecho círculo de las relaciones personales, son las que muchas veces desencadenan estos episodios.

Sencillamente porque nos hunden y nos duelen tanto, que no somos capaces de reaccionar. O bien tratando de argumentar en contra de la humillación o bien tratando de superarla pese a lo inesperada que pueda resultar.

Puede ocurrir que hayamos sido víctimas de alguna bajeza que nos resulte incomprensible o intolerable, mucho más cuando provenga de una persona de la que nunca lo sospecharíamos.

El primer paso en la lucha contra el abatimiento, lo daremos perdonando a quién nos ha humillado o ha cometido alguna bajeza contra nosotros. El perdón, es también la mejor forma de volver a creer en nosotros mismos.

Diego Acosta

AMOR ETERNO

Los hombres olvidamos muy fácilmente
el privilegio que tenemos de clamar a Dios
en la necesidad, en la angustia, en la desesperanza.
Seamos agradecidos y brindemos al Prójimo
el mismo Amor que recibimos.
Diego Acosta – MENSAJE

A DONDE IREMOS…?

DEVOCIONAL

A donde iremos en la hora de la angustia?

A donde iremos en la hora del miedo?

A donde iremos?

Muchas veces he pensado en que es probable que haya muchas personas que se hayan hecho estas preguntas y aún así, se siguen negando las respuestas.

Me apena profundamente pensar que haya quienes sabiendo de Dios reniegan de ÉL, de su Hijo, de su Mensaje de Salvación, negándose toda posibilidad de ser libres con la Verdad.

Y también pienso cuál es mi parte de responsabilidad en estos dramas personales, que son más dolorosos sabiendo que quienes perseveren por este camino tan equivocado, solo tendrán el dolor eterno.

A donde iremos?

Es necesario insistir que el único lugar al que debemos ir es ante el Trono de la Gloria, para pedir perdón por nuestros pecados, por la soberbia y por el orgullo que nos impide aceptar que nada somos.

Clamo al Eterno para que este Mensaje no se pierda, como tantos otros que no fueron escuchados.

Mateo 25:31
Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria,
y todos los santos ángeles con él,
entonces se sentará en su trono de gloria,

 

Diego Acosta / Neide Ferreira