LA BIBLIA Y EL TRABAJO

BLOG del TIEMPO

En el Día del Trabajo es natural que se hable de las justas reinvindicaciones, de quienes se ganan el sustento con el esfuerzo de todos los días.

Desde todos los sectores políticos, se reclama justicia para los trabajadores. Pero casi nunca se habla de la preocupación del Dios Todopoderoso por los hombres y mujeres que trabajan.

Mencionaremos algunas referencias concretas que nos deben hacer reflexionar, acerca de esta cuestión tan importante:

Levítico 19:13

No oprimirás a tu prójimo, ni le robarás. No retendrás el salario del jornalero en tu casa hasta la mañana.

Jeremías 22:13

!!Ay del que edifica su casa sin justicia, y sus salas sin equidad, sirviéndose de su prójimo de balde, y no dándole el salario de su trabajo!

Malaquías 3:5

Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran mentira, y los que defraudan en su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos.

Juan 4:36

Y el que siega recibe salario, y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra goce juntamente con el que siega.

1 Timoteo 5:18

Pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla; y: Digno es el obrero de su salario.

En el Día del Trabajo, pensemos en lo que el Eterno ha mandado a través de sus profetas y hombres de fe, para cuidar al que vive de su salario.

Diego Acosta

 

Juan el Baustista, profetizado – 22

La vida del hijo de Isabel prima de María,
tiene excepcionales contornos

pues su presencia en el desierto de Judá
fue anunciada por el profeta Isaías además de ser destacado
como de similares condiciones del profeta Elías.
Juan el Bautista, anunció la venida del Mesías.
JESÚS Y MATEO

EL PERDÓN-2

<< ESTUDIO BÍBLICO

Dios es en esencia perdonador y el rey David le expresa claramente en el salmo, ya que él conoce esta faceta de su Dios.

Isaias 6:6-7.

6Y voló hacia mí uno de los serafines, teniendo en su mano un carbón encendido, tomado del altar con unas tenazas; 7y tocando con él sobre mi boca, dijo: He aquí que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa, y limpio tu pecado.

El propósito de Dios es limpiarnos de nuestro pecado, así el que se acerca a Dios será limpiado de sus pecados. El Señor limpio los labios del profeta Isaías cuando el exclamó: Soy hombre de labios inmundos.

Jeremias 2:20-24.

20Porque desde muy atrás rompiste tu yugo y tus ataduras, y dijiste: No serviré. Con todo eso, sobre todo collado alto y debajo de todo árbol frondoso te echabas como ramera. 21Te planté de vid escogida, simiente verdadera toda ella; ¿cómo, pues, te me has vuelto sarmiento de vid extraña? 22Aunque te laves con lejía, y amontones jabón sobre ti, la mancha de tu pecado permanecerá aún delante de mí, dijo Jehová el Señor. 23¿Cómo puedes decir: No soy inmunda, nunca anduve tras los baales? Mira tu proceder en el valle, conoce lo que has hecho, dromedaria ligera que tuerce su camino, 24asna montés acostumbrada al desierto, que en su ardor olfatea el viento. De su lujuria, ¿quién la detendrá? Todos los que la buscaren no se fatigarán, porque en el tiempo de su celo la hallarán.

Cuando alguien se esfuerza en ocultar su pecado no puede alcanzar el perdón de Dios.

 

Malaquias 3:1-5.

1He aquí, yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí; y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis, y el ángel del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová de los ejércitos. 2¿Y quién podrá soportar el tiempo de su venida? ¿o quién podrá estar en pie cuando él se manifieste? Porque él es como fuego purificador, y como jabón de lavadores. 3Y se sentará para afinar y limpiar la plata; porque limpiará a los hijos de Leví, los afinará como a oro y como a plata, y traerán a Jehová ofrenda en justicia. 4Y será grata a Jehová la ofrenda de Judá y de Jerusalén, como en los días pasados, y como en los años antiguos. 5Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran mentira, y los que defraudan en su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos.

Dios es fuego purificador y jabón de lavadores para limpiar el corazón del hombre y hacerle instrumento útil en sus manos.

Pr. Ramón Ubillos

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BUSCAR

Desde siempre los hombres hemos buscado con afán…algo que no sabemos muy bien que es, ni mucho menos donde lo podemos encontrar.

Esto es lo que muchos llaman: Un lugar en el mundo!

Pero es realmente un lugar en el mundo lo que buscamos?

Estoy convencido que NO!

Simplemente se trata de una cuestión que tiene su principio en el hecho de que ignoramos quienes verdaderamente somos.

Es decir: para buscar algo tenemos que saber que es y llegado el caso, para que lo precisamos. Por eso la búsqueda es tan compleja, frustrante y además innecesaria.

Nunca encontraremos lo que buscamos, simplemente porque eso que pretendemos no existe.

Y por qué no existe?

El fin último de nuestra existencia, que tal vez sea lo que en verdad estamos buscando, no lo encontraremos en nuestra vida mundana.

La encontraremos en el nivel superior, donde existe la vida espiritual y más concretamente, la Vida con Jesús, que es la única que nos llenará de plenitud.

Conozco a personas, que aún en el momento final, se planteaban la pregunta más cruda: Para qué he vivido todos estos años?

Junto al Hijo del Hombre tendremos un propósito, tendremos otra forma de vivir porque tendremos una Guía y también principios que respetar.

Yo también formaba parte del grupo que buscaba afanosamente el sentido para mi vida. Hasta que un día lo encontré. Por la Gracia!

Ahora lo único que debo buscar es ser más fiel cada día, es servir mejor y más misericordiosamente a quienes me rodean. Porque así estaré sirviendo al Único que merece ser servido: Jesús!

Malaquías 3:1

He aquí, yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí; y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis, y el ángel del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová de los ejércitos.

Malaquias 3:1

Eis que eu envio o meu anjo, que preparará o caminho diante de mim; e, de repente, virá ao seu templo o Senhor, a quem vós buscais, o anjo do concerto, a quem vós desejais; eis que vem, diz o Senhor dos Exércitos.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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AGRADAR

Tengo perfectamente presente el momento y las circunstancias en las que leí una frase, que fue un auténtico choque en mi vida.

La frase decía: El mejor método para fracasar, es el de intentar agradar a todo el mundo.

Más sorprendente resultó cuando unos años más tarde, en mis primeros tiempos de lectura de la Palabra de Dios, comprobé que esa frase había sido formulada alrededor de 2.500 años antes.

Por qué la frase causó un doble impacto en mi vida?

Simplemente porque me permitió contrastar una y otra vez, la triste experiencia de pretender agradar a las personas que nos rodean.

Porque finalmente no agradamos a nadie y ni siquiera sabemos cómo realmente somos!

Recuerdo a propósito de este tema, que soy no como me gustaría ser, sino que soy mejor, porque soy como el Eterno ha deseado que sea.

Y resulta fundamental este punto: Soy mejor de lo que yo mismo me imagino, porque soy exactamente lo que Creador ha establecido que sea!

Y ÉL no solamente representa la Voluntad Soberana, sino que representa la Perfección.

Y no es que yo sea perfecto. No. Simplemente debo ser como soy, sin cometer el torpe error de buscar agradar a los demás.

Solamente debo cumplir con lo que Dios ha establecido para mí.

El mundo siempre demandará más y más de mí y de todos los que forman la sociedad. Es su método infalible para crear descontento, amargura, desesperanza.

No olvidemos nunca esto: Es al Todopoderoso al único al que debemos agradar con nuestra vida!

Malaquías 1:9

Ahora, pues, orad por el favor de Dios, para que tenga piedad de nosotros.

Pero ¿cómo podéis agradarle, si hacéis estas cosas? dice Jehová de los ejércitos.

Malaquias 1:9

Agora, pois, suplicai o favor de Deus, e ele terá piedade de nós;

isto veio da vossa mão; aceitará ele a vossa pessoa? — diz o Senhor dos Exércitos.

Diego Acosta / Neide Ferreira

LA BIBLIA – Malaquías 3

Malaquías anuncia mensajeros, exhorta con los diezmos y

castigo a los malos y bendiciones a los justos.

1  He aquí, yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí; y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis, y el ángel del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová de los ejércitos.

¿Y quién podrá soportar el tiempo de su venida? ¿o quién podrá estar en pie cuando él se manifieste? Porque él es como fuego purificador, y como jabón de lavadores.

Y se sentará para afinar y limpiar la plata; porque limpiará a los hijos de Leví, los afinará como a oro y como a plata, y traerán a Jehová ofrenda en justicia.

Y será grata a Jehová la ofrenda de Judá y de Jerusalén, como en los días pasados, y como en los años antiguos.

Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran mentira, y los que defraudan en su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos.

Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.

Desde los días de vuestros padres os habéis apartado de mis leyes, y no las guardasteis. Volveos a mí, y yo me volveré a vosotros, ha dicho Jehová de los ejércitos. Mas dijisteis: ¿En qué hemos de volvernos?

¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas.

Malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado.

10 Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.

11 Reprenderé también por vosotros al devorador, y no os destruirá el fruto de la tierra, ni vuestra vid en el campo será estéril, dice Jehová de los ejércitos.

12 Y todas las naciones os dirán bienaventurados; porque seréis tierra deseable, dice Jehová de los ejércitos.

13 Vuestras palabras contra mí han sido violentas, dice Jehová. Y dijisteis: ¿Qué hemos hablado contra ti?

14 Habéis dicho: Por demás es servir a Dios. ¿Qué aprovecha que guardemos su ley, y que andemos afligidos en presencia de Jehová de los ejércitos?

15 Decimos, pues, ahora: Bienaventurados son los soberbios, y los que hacen impiedad no sólo son prosperados, sino que tentaron a Dios y escaparon.

16 Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero; y Jehová escuchó y oyó, y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen a Jehová, y para los que piensan en su nombre.

17 Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos, en el día en que yo actúe; y los perdonaré, como el hombre que perdona a su hijo que le sirve.

18 Entonces os volveréis, y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve.

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A BÍBLIA – Malaquias 3

Malaquias avisa sobre mensageiros, exorta sobre os dízimos e fala de castigo a ímpios e bençãos para os justos.

 1 Eis que eu envio o meu anjo, que preparará o caminho diante de mim; e, de repente, virá ao seu templo o Senhor, a quem vós buscais, o anjo do concerto, a quem vós desejais; eis que vem, diz o Senhor dos Exércitos.

Mas quem suportará o dia da sua vinda? E quem subsistirá, quando ele aparecer? Porque ele será como o fogo do ourives e como o sabão dos lavandeiros.

E assentar-se-á, afinando e purificando a prata; e purificará os filhos de Levi e os afinará como ouro e como prata; então, ao Senhor trarão ofertas em justiça.

E a oferta de Judá e de Jerusalém será suave ao Senhor, como nos dias antigos e como nos primeiros anos.

E chegar-me-ei a vós para juízo, e serei uma testemunha veloz contra os feiticeiros, e contra os adúlteros, e contra os que juram falsamente, e contra os que defraudam o jornaleiro, e pervertem o direito da viúva, e do órfão, e do estrangeiro, e não me temem, diz o Senhor dos Exércitos.

Porque eu, o Senhor, não mudo; por isso, vós, ó filhos de Jacó, não sois consumidos.

Desde os dias de vossos pais, vos desviastes dos meus estatutos e não os guardastes; tornai vós para mim, e eu tornarei para vós, diz o Senhor dos Exércitos; mas vós dizeis: Em que havemos de tornar?

Roubará o homem a Deus? Todavia, vós me roubais e dizeis: Em que te roubamos? Nos dízimos e nas ofertas alçadas.

Com maldição sois amaldiçoados, porque me roubais a mim, vós, toda a nação.

10 Trazei todos os dízimos à casa do tesouro, para que haja mantimento na minha casa, e depois fazei prova de mim, diz o Senhor dos Exércitos, se eu não vos abrir as janelas do céu e não derramar sobre vós uma bênção tal, que dela vos advenha a maior abastança.

11 E, por causa de vós, repreenderei o devorador, para que não vos consuma o fruto da terra; e a vide no campo não vos será estéril, diz o Senhor dos Exércitos.

12 E todas as nações vos chamarão bem-aventurados; porque vós sereis uma terra deleitosa, diz o Senhor dos Exércitos.

13 As vossas palavras foram agressivas para mim, diz o Senhor; mas vós dizeis: Que temos falado contra ti?

14 Vós dizeis: Inútil é servir a Deus; que nos aproveitou termos cuidado em guardar os seus preceitos e em andar de luto diante do Senhor dos Exércitos?

15 Ora, pois, nós reputamos por bem-aventurados os soberbos; também os que cometem impiedade se edificam; sim, eles tentam ao Senhor e escapam.

16 Então, aqueles que temem ao Senhor falam cada um com o seu companheiro; e o Senhor atenta e ouve; e há um memorial escrito diante dele, para os que temem ao Senhor e para os que se lembram do seu nome.

17 E eles serão meus, diz o Senhor dos Exércitos, naquele dia que farei, serão para mim particular tesouro; poupá-los-ei como um homem poupa a seu filho que o serve.

18 Então, vereis outra vez a diferença entre o justo e o ímpio; entre o que serve a Deus e o que não o serve.

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LA BIBLIA – Malaquías 2

Malaquías reprende a los sacerdotes y anuncia maldiciones de Jehová por su infidelidad.

1 Ahora, pues, oh sacerdotes, para vosotros es este mandamiento.

Si no oyereis, y si no decidís de corazón dar gloria a mi nombre, ha dicho Jehová de los ejércitos, enviaré maldición sobre vosotros, y maldeciré vuestras bendiciones; y aun las he maldecido, porque no os habéis decidido de corazón.

He aquí, yo os dañaré la sementera, y os echaré al rostro el estiércol, el estiércol de vuestros animales sacrificados, y seréis arrojados juntamente con él.

Y sabréis que yo os envié este mandamiento, para que fuese mi pacto con Leví, ha dicho Jehová de los ejércitos.

Mi pacto con él fue de vida y de paz, las cuales cosas yo le di para que me temiera; y tuvo temor de mí, y delante de mi nombre estuvo humillado.

La ley de verdad estuvo en su boca, e iniquidad no fue hallada en sus labios; en paz y en justicia anduvo conmigo, y a muchos hizo apartar de la iniquidad.

Porque los labios del sacerdote han de guardar la sabiduría, y de su boca el pueblo buscará la ley; porque mensajero es de Jehová de los ejércitos.

Mas vosotros os habéis apartado del camino; habéis hecho tropezar a muchos en la ley; habéis corrompido el pacto de Leví, dice Jehová de los ejércitos.

Por tanto, yo también os he hecho viles y bajos ante todo el pueblo, así como vosotros no habéis guardado mis caminos, y en la ley hacéis acepción de personas.

10 ¿No tenemos todos un mismo padre? ¿No nos ha creado un mismo Dios? ¿Por qué, pues, nos portamos deslealmente el uno contra el otro, profanando el pacto de nuestros padres?

11 Prevaricó Judá, y en Israel y en Jerusalén se ha cometido abominación; porque Judá ha profanado el santuario de Jehová que él amó, y se casó con hija de dios extraño.

12 Jehová cortará de las tiendas de Jacob al hombre que hiciere esto, al que vela y al que responde, y al que ofrece ofrenda a Jehová de los ejércitos.

13 Y esta otra vez haréis cubrir el altar de Jehová de lágrimas, de llanto, y de clamor; así que no miraré más a la ofrenda, para aceptarla con gusto de vuestra mano.

14 Mas diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha atestiguado entre ti y la mujer de tu juventud, contra la cual has sido desleal, siendo ella tu compañera, y la mujer de tu pacto.

15 ¿No hizo él uno, habiendo en él abundancia de espíritu? ¿Y por qué uno? Porque buscaba una descendencia para Dios. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales para con la mujer de vuestra juventud.

16 Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que cubre de iniquidad su vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y

17 Habéis hecho cansar a Jehová con vuestras palabras. Y decís: ¿En qué le hemos cansado? En que decís: Cualquiera que hace mal agrada a Jehová, y en los tales se complace; o si no, ¿dónde está el Dios de justicia?

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